Colaborando con la redacción de Toquedeportivo.com, Bruno Espinosa con experiencia en Marketing y actual Prensa de San Jorge, escribe un interesante artículo sobre la relación existente entre el Mkt, el deporte y la pasión.
Las alternativas que maneja la industria deportiva de la mano del uso de las redes sociales y la tecnología digital, tienen mucho que ver en que el diálogo para llegar a los clientes tenga nuevo rostro y un diálogo diferente, más directo, más al corazón.
En ese sentido, personalmente creo que hemos llegado a una evolución tal, que la gente se enamora de las experiencias, de los triunfos, de momentos épicos, y en esa dirección, el deporte conlleva una carga de experiencias inigualables. Esa carga se centra en la sensación más inexplicable de todas. LA PASIÓN
Sin lugar a dudas, el deporte, en todas sus manifestaciones, es la actividad con mayor dosis de pasión que existe. Quien no soñó o sueña con llegar a ser como ese deportista que vende una figura casi divina y que en algún punto penetra en nuestro cerebro haciendo experimentar sensaciones infinitas. Miles de consumidores del deporte en general, tratan de imitar, igualar o seguir los pasos de sus ídolos. Tal es así, que hay situaciones en donde tratan de parecerse en su vestimenta, en su fisiología y hasta en su vida cotidiana.
Euromericas Sport Marketing llevó a cabo un estudio en donde comprobó que el 76 % de la gente prefiere mensajes que incluyan “el componente deporte de algún modo”.
Por tal motivo, en la actualidad, muchas empresas han adaptado sus estrategias de mercadeo centrándose en la relación deporte-publicidad y utilizando la PASIÓN como núcleo y materia prima de todas las campañas de marketing.
El deporte lleva a los públicos a compartir sensaciones incomparables. Los comerciales de televisión, empiezan a migrar y tienen más vistas en los canales de internet por los distintos dispositivos y escenarios de acceso, en muchos casos más que en la televisión. En mi casa esta semana, mirando una serie, tras llegar los comerciales lo primero que hice fue tomar el control remoto de modo instintivo, pero el mismo no se usó porque el corte publicitario era de un auspiciantes de una marca que utilizó el deporte como tema del mismo, en donde el protagonista no era anónimo sino que era un jugador de futbol.
Situaciones que se reiteran de modo sistemático en los diversos públicos, es el efecto publicidad-deporte, porque cruza la corteza cerebral instalándose en el corazón y activa la pasión del consumidor.
La pasión por el deporte, persuade, fanatiza, vende y se transforma en resultados para las marcas, brindando felicidad a los consumidores y lo fundamental activa adrenalina, contrariamente al cansancio y stress mental, que es lo que evita el consumo.
Por Bruno Espinosa Sports Marketing Manager de San Jorge