Antes de que comience el partido del prócer frente Huazihul, la gente de Belgrano se juntó en su cancha para despedir a Genaro en el lugar donde él fue tan feliz, una cancha de rugby.
El plantel superior fue recibido por niños de las inferiores, hinchas y el plantel femenino de rugby con cantos, bengalas y globos para mostrar su apoyo. Luego cuando ingreso su “rival” de la tarde, ambos equipos realizaron un minuto de silencio donde la visita se mostró con una bandera en apoyo al club y a la familia Fortunato.
La parte más sensible fue cuando dirigentes del prócer le obsequiaron a la familia, la camiseta que vistió Genaro junto a una pancarta en donde aparecía él, su hermano Fausto y su padre Miguel Ángel, la cual fue entregada a su mama. Su padre, visiblemente emocionado solo dijo, “no hay que llorar, él nos quería feliz, ¡Vamos Belgrano!”.
Al final del partido, el cual el prócer gano, Fausto fue acompañado por su papá para reencontrarse y abrazarse con su madre, mientras todo el público aplaudía y acompañaba a los Fortunato. Excelente iniciativa de Belgrano para despedir a su querido “hijo” que siempre estará con ellos.
POR RODRIGO RIQUELME/TOQUEDEPORTIVO.COM
