El gran objetivo cambió tras la eliminación en la Libertadores, la caída ante Boca y ante la posibilidad de que Gallardo no siga
Copa Libertadores. Copa Argentina. Superliga. Así fue el ranking de los tres objetivos que se propuso el plantel de River junto con el cuerpo técnico durante las dos semanas de pretemporada en Estados Unidos. Con un campeonato local que a largo plazo permite una hipotética recuperación -hoy, a 12 puntos del líder Boca, parece difícil-, las definiciones mano a mano siempre tuvieron la prioridad. Por eso, ya sin poder alzar el trofeo continental, la posibilidad de jugar por segunda vez consecutiva la final de la Copa Argentina tomó un lugar preponderante.
Atlas, Instituto, Defensa y Justicia y Atlanta fueron los rivales que dejó en el camino River para llegar a la semifinal que disputará el domingo ante Deportivo Morón, en Mendoza. Quizá, ni el más pesimista imaginaba que el contexto sería el actual: golpeado por duplicado por las caídas con Lanús y Boca y con la necesidad de conseguir una rápida recuperación para no quedarse con las manos vacías.
«Había dos objetivos en este año: la Libertadores y la Copa Argentina. Si las vamos a comparar, no tienen comparación, hay que ser realistas. Pero ahora vamos a pelear a muerte la Copa Argentina para ganarla, sería una gran alegría para el grupo. Como decimos siempre desde que empezamos a jugarla: al principio nadie la quiere, pero después la quieren todos», explicó Ignacio Scocco , y luego agregó: «Teníamos la ilusión de llegar a la final de la Libertadores y no estar tan lejos en el campeonato, más allá de que no nos damos por vencidos porque queda mucho. Pero a los malos resultados que se dieron esa semana, tenemos que agregarle que estamos todavía con posibilidades de ganar una Copa».
A diferencia del año pasado, el incentivo del presente certamen es un poco menor para el millonario: en la última final con Rosario Central, que ganó de forma agónica por 4-3 con el recordado gol de Iván Alonso en Córdoba, obtuvo el cupo para la Copa Libertadores que disputó hasta hace semanas, mientras que esta vez ya está clasificado al torneo 2018 por haber sido subcampeón del Torneo de Primera División 2016/17.
Más allá de eso, el desafío es un gran estímulo para el ánimo del equipo, que buscará conocer la victoria después de tres dolorosas derrotas en fila. Además, pase lo que pase con la continuidad de Marcelo Gallardo en un futuro, todo el mundo River coincide en que la finalización de su contrato no merece un cierre gris.
«Francescoli habló con Lux [el manager dijo que el arquero llegó por necesidad] y reconoció su error. Quedó ahí. Todos somos responsables de este momento»
De ahí también la importancia de poder cerrar el año con una nueva alegría. En caso de superar a Deportivo Morón, el Muñeco jugaría su décima final como técnico de la institución de Núñez. De las anteriores, ganó seis -son los seis títulos que tiene- y perdió tres: ante Huracán en la Supercopa Argentina 2015, frente a Barcelona en el Mundial de Clubes 2015 y con Lanús en la Supercopa Argentina 2017.
Por otro lado, también habrá un plus económico de conseguir un triunfo en tierras mendocinas. Hasta hoy, por haber superado cuatro ruedas del torneo, River ya embolsó 3.972.000 pesos. En caso de acceder a la final, sumará 2.280.000 y, de ganar nuevamente el título, se adjudicará 4.280.000. En total, podría acumular 10.532.000.
Sin definiciones, Gallardo todavía se encuentra en proceso de rearmado de un once titular que tendrá variantes. Enzo Pérez viajó a Rusia con la Selección, por lo que el DT tendrá que definir si mantiene el esquema 4-1-4-1 y lo suplanta con un volante o hace ingresar a un delantero, cambiando el sistema. En el reducido de la práctica de ayer, con dos grupos de nueve jugadores, Auzqui y De La Cruz jugaron para los titulares -Montiel, Pinola, Ponzio, Rojas, Nacho Fernández, Pity Martínez y Scocco completaron la nómina-.
Además, resta esperar por la evolución de Maidana por la molestia que arrastra en la rodilla derecha -llegaría sin problemas- y las recuperaciones de las lesiones musculares de Saracchi y Moreira. Se estima que el lateral uruguayo podrá estar para ingresar por Casco, quien ayer actuó con los suplentes, mientras que el paraguayo tendría un tiempo mayor para volver a decir presente. En los tres días restantes, el DT definirá el equipo que buscará dar el primero de los dos pasos que quedan para hacer, al menos, más ameno el fin de año.
Fuente: Lanacion