Alan Núñez, campeón el pasado miércoles con Rincón del Atuel del Torneo “ARA San Juan”, habló con toquedeportivo.com sobre su actualidad, proyectos personales y futuro.
El habilidoso delantero del Valle de Uco, que llegó al conjunto Verde a comienzos de la Zona Campeonato, con la esperanza de pelear el campeonato, lo logró este miércoles pasado ante Huracán. Ingresó en los minutos finales, pero su participación en el campo fue in crescendo con el correr de los partidos desde su llegada.
¿Cómo llegó Alan Núñez acá? ¿Qué pasó y cómo lograste superar los obstáculos que tenías delante?
–Tuve muchas oportunidades. A veces creemos que el tren pasa una sola vez en la vida y no es así, pasa varias veces. Yo tuve ataques de pánico hasta una edad avanzada y eso me alejó de las oportunidades grandes que se me presentaron de jugar en clubes importantes, inclusive fuera del país. Terminé jugando en categorías menores para no alejarme de Tupungato, mi ciudad, a causa de estas crisis. En el momento uno no se da cuenta pero cuando crece se arrepiente. Ves amigos, técnicos en el futbol profesional, en la primera división y eso duele un poco, pero son cosas que pasan y por algo. Hoy estoy agradecido de lo que vivo, lo que pasé me hizo madurar en muchos aspectos de mi vida. Trato de que todas esas piedras que sorteé en el camino me sirvan para ayudar a chicos a superar esa parte dura. Me dio herramientas para brindar a los demás, porque sé que hay chicos a los que les es difícil y les cuesta mucho el desapego, cuando van a clubes nuevos o tienen que viajar. Fue una parte dura de mi vida, pero no me quejo porque tuve la valentía de afrontarlo y superar esa etapa. Eso me llevó a aceptar desafíos y tuve la oportunidad de salir campeón en clubes importantes: Maipú, Huracán Las Heras, en equipos de Mendoza que se jugaban cosas importantes.
-Pero después los proyectos de vida que tenía me quitaban esos tiempos, yo había dejado un poco de lado el fútbol por mi edad y planeaba para mi futuro algo que deviniera del fútbol; y es justo lo que trato hoy en día. Tengo ofertas para saltar a otra categoría, pero no me fijo en la plata sino en lo que busco para mi devenir y esas propuestas las dejo de lado. Por lo tanto si sigo jugando al fútbol, la idea es mantener una cierta categoría para poder aprovechar mis tiempos e invertir también en lo que proyecto más adelante.
¿Tenías alguna referencia de Rincón del Atuel?
–Sinceramente muy pocas. Sabía que hizo una buena campaña en el último Federal C y recién cuando me contactaron, tomé referencia del club, de sus jugadores referentes y ahí me llamó mucho más la atención.
¿Fue fácil adaptarte al grupo?
–Fue fácil por la calidad de personas que hay en el plantel. Me costó un poco adaptarme al profe Mario Gil que estaba en ese momento; porque es muy exigente y profesional, labura como pocos. Para mí fue importante porque me quedo con aprendizajes muy valiosos para mi vida, fue lo único complicado en la adaptación, pero a él también le debemos este torneo que sacamos adelante. Pero en el grupo la verdad que fue muy fácil.
Venías con expectativa, pero ¿imaginaste que se podía dar un campeonato como se les dio?
–En realidad, expectativas pocas. Sí lo pensé como una linda oportunidad de vida ya que pasé un momento bastante feo en mi pueblo a principio de año y la idea era alejarme un poco y meterme de lleno en el fútbol, ya que me dieron la oportunidad; mediante el técnico Néstor Yáñez, que por el llegué al club. Y por cómo trabajamos cada entrenamiento vi que había grupo para pelear objetivos importantes. Rincón venía de perder la final del Federal C y con los nombres de jerarquía que el club tiene esas expectativas fueron creciendo y partido tras partido eso fue aumentando.
¿Cómo es tu estadía en San Rafael? ¿Te sentís a gusto?
–La estadía en San Rafael es hermosa, no conocía mucho, más allá de pasar por ahí de paseo. Tuve la suerte de coordinar con un amigo para poder quedarme acá así respetaba bien los días de entrenamiento, poder exigirme y estar tranquilo. Me enamoré de la ciudad.
-Me siento bastante a gusto en lo persona y en lo grupal y de lo que conseguimos más allá de cómo se dio todo al final, terminé un poco disgustado pero son cosas que hay en todo equipo, de querer jugar todos los partidos. Saber que venía rindiendo bien y después ver situaciones al final que no se entienden. En los últimos tres/cuatro partidos terminé en el banco de suplentes cuando venía de hacerle un gol importante a Pilares y mi rendimiento terminó siendo atípico con respecto a lo que venía demostrando; anímicamente me vine un poco abajo porque la cabeza también juega y yo no estaba de acuerdo con esa decisión técnica. Pero como te decía, siempre pensando en lo grupal, siempre pensando en ir para adelante en pos del crecimiento del grupo. Es lo que valoro siempre, en lo grupal cuando se obtienen los resultados y los grandes de safíos, más allá de que individualmente podemos marcar la diferencia.
Tenés una escuelita de fútbol donde vivís, ¿cómo va ese proyecto?
–Con mi hermano fundamos un club hace un año y medio. Estamos trabajando sólo con escuelita de fútbol, chicos de 3 a 10 años, ya son más de 90 chicos los que asisten. Es un proyecto que empezamos hace poco. No hay nada más lindo que los chicos crezcan haciendo este deporte tan lindo; divirtiéndose, pasándola bien y no exigiéndolos ya que más adelante tendrán tiempo para eso. A parte también tengo la fortuna de tener contactos dentro y fuera del país; cuatro chicos estuvieron por San Lorenzo, dejaron una buena imagen de los jugadores que hay en Tupungato y de esos cuatro chicos, hay mucho interés en uno de ellos. Contento de esto que recién empieza y todo en torno al fútbol que es lo que más me gusta.
¿Qué sigue para vos ahora? ¿Pensas en quedarte?
–No me esperaba lo que iba a repercutir mi actuación en este torneo y tuve llamados para afrontar el Regional de un club grande de San Rafael como así también de Mendoza. Tuve la suerte de que el miércoles viniera gente del Nacional B, pero bueno no tuve la oportunidad de jugar lo suficiente; pero estar en conocimiento de que vinieron a verme me alegra por el trabajo que se hizo durante el tiempo que estuve. Ahora termino de disfrutar, tenemos un pequeño descanso y ahí asentar la cabeza en lo que viene. Pero creo que mi ciclo en Rincón ya terminó, así que me gusta ponerme nuevos objetivos. Ya cumplimos con los chicos en lo grupal en Rincón y la idea es seguir en otro club.
¿Querés agradecerle a alguien?
–Agradezco a mi familia que siempre me apoyó en cada decisión, al club por confiar en mí, a Ángel Brancato con quien tengo una buena relación y a cada uno de mis compañeros por las alegrías compartidas por ser parte de una linda familia y a la gente que me trató con tanto cariño. Y que todo lo lindo llegue al club.
Por Marie González/Toquedeportivo.com