Romain Grosjean sufrió un accidente bestial con su Haas en los primeros metros del GP de Bahrein de Fórmula 1. Así fue el impacto y su posterior rescate.
Instantes después, una gran bola de fuego rodeó la escena, haciendo temer lo peor. Pero cerca de 30 segundos después, el francés emergió por detrás del guardarráil y de entre las llamas sin su botín izquierdo y con el mono y el casco humeando.
Afortunadamente, el piloto soló presentó quemaduras en las manos y el tobillo tras los chequeos iniciales en el coche médico, que acudió a la escena apenas unos segundos después del choque y que ayudó a apagar el fuego junto con los comisarios de la zona.
El francés fue evacuado en helicóptero después de pasar por el centro médico del circuito, camino del hospital militar MDF MC, en la capital de Bahrein, Manama.
Por qué se incendió el Haas de Grosjean en Bahrein
El monoplaza de Haas penetró en un ángulo diagonal en los guardarráiles del interior de la curva 3, y su morro abrió las hojas de estos, atravesándolo.
Pero detrás de la célula de supervivencia, el coche se partió casi a la mitad, por la zona del depósito de combustible. Esto provocó que el combustible se esparciera rápidamente en la zona, lo que, junto a las chispas del impacto, hizo estallar la espeluznante bola de fuego que nos encogió el corazón.
Grosjean pudo desabrocharse los cinturones en mitad del incendio, escapando por encima del Halo después de cerca de 30 segundos, y pudiendo saltar hacia la pista por encima de los restos del guardarraíl. Los comisarios del puesto más cercano ayudaron a apagar el fuego con sus extintores, mientras el francés se dolía de las manos y el tobillo junto a los miembros del coche médico.
Fuente: Esmotorsport