Con la llegada del ‘Gran Circo’ de la Fórmula Uno a Mónaco, el glamour se presenta en el paddock con más fuerza que nunca. En el caso de los pilotos es distinto, puesto que muchos de ellos aprovechan para poder lucir nuevos diseños de cascos novedosos y sorprendentes. En 2015, la FIA prohibió que los pilotos pudieran cambiar de cascos menos en el principado, que confirma su condición de ‘especial’ en el calendario una vez más con este peculiar permiso. Pero en el Principado no todo es estética, ya que por ejemplo Romain Grosjean deja de lado la belleza del diseño de su casco y aprovecha para homenajear a su amigo Jules Bianchi, fallecido el pasado mes de julio, como consecuencia del accidente que sufrió en el Gran Premio de Japón de 2014.