Toma temperatura el mundial de Fórmula Uno. Mucho más luego de la victoria de Lewis Hamilton en el Gran Premio de México. Una victoria que le permitió recortar la ventaja que lo separa de Nico Rosberg, su compañero de equipo en Mercedes, segundo en la carrera de hoy y actual líder del campeonato con 19 puntos de ventaja cuando quedan dos carreras para el final. El tercer lugar fue del chico Max Verstappen (Red Bull), luego de una pelea picante con Vettel en el final de la prueba azteca.
Con Hamilton sacándole el jugo a la pole con una largada perfecta, la carrera tuvo su primer pico de tensión al llegar a la primera curva con dos protagonistas pesados. Nico Rosberg (Mercedes), puntero del campeonato, y Max Verstappen (Red Bull), sin chances en la pelea por el título pero que ya demostró todo su potencial con el triunfo en España y con otros cinco podios. Parecía que el holandés le había ganado la posición, pero el alemán no se entregó y el toque fue inevitable. Rosberg circuló unos metros por afuera del asfalto, pero se quedó con el segundo lugar. Ambos continuaron en carrera, pero el piloto de Mercedes pudo haber perdido mucho.
Otro toque de la primera vuelta, en este caso entre los compañeros en el equipo MRT, Pascal Wehrlein y Esteban Ocon, obligó al ingreso del auto de seguridad. El australiano Danniel Ricciardo aprovechó esta ventana para pasar por boxes y cambiar neumáticos, volvió a pista en el 15º lugar, pero con una estrategia diferente a la del comienzo de la competencia y listo para comenzar a ganar posiciones.
Las autoridades de la carrera abrieron una investigación por aquel toque entre Rosberg y Verstappen, pero rápidamente anunciaron que no habría sanciones. Mientras tanto, en pista, el alemán lograba despegarse del acoso del holandés. Entre las vueltas 13 y la 21 pararon los tres de adelante. Primero fue Verstappen, luego Hamilton y por último Rosberg. Entonces la punta quedó por un buen rato en manos de Sebastian Vettel, que esperó hasta la vuelta 32 para visitar a sus mecánicos.
Cuando el alemán de Ferrari volvió a la pista, la fila quedó como al principio. Hamilton adelante con una ventaja para nada decisiva (poco más de cinco segundos), seguido por Rosberg y Verstappen, que volvía a la carga con toda la intención de quedarse con el segundo lugar. En la vuelta 50 el Mercedes de Rosberg patinó en una curva y en la recta siguiente Verstappen llegó a superarlo, pero el joven holandés llegó muy pasado a la curva y no pudo mantener la posición.
Después de esa acción el Red Bull comenzó a perder rendimiento y Vettel se le fue encima. La Ferrari parecía más veloz, pero Verstappen resistió y entonces Ricciardo se sumó a la pelea. Fue poco más de una vuelta con los tres bien pegados, hasta que en una curva Vettel y Ricciardo estuvieron a punto de tocarse y arruinar lo que habían conseguido hasta ahí. Entonces los tres entendieron que era hora de retirarse de la batalla.
Adelante, todo fue tranquilidad hasta el final. Hamilton llegó con algo más de ocho segundos de ventaja sobre Rosberg y ya comenzó a pensar en el Gran Premio de Brasil (el próximo 13 de noviembre). El alemán sabe que con dos segundos puestos, será campeón del mundo. Se viene un final a pura emoción.
Fuente: Clarín.comár
