Entraron Tevez, Abila y Reynoso, Salvio siguió metiendo y Boca volvió a estar cerca del empate pero Rossi siguió acumulando atajadas para el aplauso. Boca fue a lo Boca por el empate. Lanús aguantó todo lo que pudo y buscó definirlo con una contra.
Con la victoria asegurada, hubo fiesta en Guidi y Cabrero. Jugando por momentos bien, el equipo de Zubeldía está segundo en la Superliga y es semifinalista en la Copa Argentina. Todo en las vísperas del duelo barrial contra Banfield -chocan el otro fin de semana-.
En las antípodas quedó Boca. El efecto River sigue repercutiendo en un equipo que cierra el año con su peor versión. Ya sin Copa y ahora sin la punta del campeonato.
Fuente: Olé