El equipo de Klopp le ganó con comodidad al Villarreal y es candidatazo para estar en la final. Rulli, Foyth y Lo Celso poco pudieron hacer ante el poderío ingles.
La incógnita no era el cómo sino cuándo. Tan delgado era el margen de error del Villarreal contra el Liverpool, que era apenas una cuestión de tiempo encontrarlo en desventaja. Porque en Anfield, el Submarino Amarilla apenas pudo conservar la pelota un par de segundos por jugada ante un equipo de Klopp que ejecutó una presión asfixiante durante todo el partido. Aguantó un tiempo la Cenicienta de estas semifinales de Champions. Tras el descanso, el muro no aguantó las grietas y se terminó cayendo. En España quedará el mal trago de que el 1-0, a los ocho minutos del segundo tiempo, fue por una carambola. Porque Henderson mandó un centro que se desvió en Estupiñán e hizo estéril el manotazo de Rulli. Fue gol en contra del ecuatoriano, pero una consecuencia de todo lo que había hecho el Liverpool.
El plantel defensivo del Villarreal
Con demasiada diferencia de jerarquía individual y colectiva, Villarreal intentó emular lo que el Atlético de Simeone había hecho contra el City (0-1), en la ida de los cuartos. Acumuló mucha gente atrás para disminuir el poder de gol de su rival y llegar con vida al partido de vuelta. El primer tiempo le salió bien, porque salvo jugadas muy aisladas, el dominio inglés no se tradujo en chances claras. Apenas una mediavuelta de Mané y un remate de media distancia de Thiago que dio en un ángulo sacudieron a Rulli, de nivel aceptable.
Lo Celso, un volante que la pasó mal
Pero para lograr esto, los de Emery decididamente entregaron el ataque. Con dos líneas de cuatro bien marcadas, Lo Celso fue un volante por derecha dedicado a clausurar su banda y casi nunca pudo agarrar la pelota. Quedó claro que el plan original era que en ataque se cerrara y jugara de enganche, pero la presión rival se lo impidió.
Es tan alta la exigencia y perfección que demanda el Liverpool, que apenas Villarreal se desconectó del partido lo lastimó. Dos minutos después del gol en contra, y todavía mareado, llegó el 2-0. Asistencia de Salah con caño incluido y definición mano a mano de Mané.
Si bien pudieron ser tres o cuatro goles, los de Klopp se conformaron con los dos de ventaja. Si bien quedan 90 minutos, la serie parecería estar casi cerrada.
Fuente: Olé
