Néstor Yáñez luego de una gran campaña, le dio junto a su cuerpo técnico y jugadores, la segunda estrella a Rincón del Atuel, y no podía faltar su palabra en Toquedeportivo.com, habló de todo, su historia, el título y lo que viene.
Nacido en San Rafael, vivió cerca de la cancha de Deportivo y ahí jugó al fútbol, «Fui un jugador frustrado» dice con total sinceridad. Luego se fue a vivir a Mendoza y por amigos, en 1998, comenzó a trabajar en el Banco Buci en una escuela de fútbol de Bermejo. Allí se dio cuenta que dirigir era su pasión, «me da más felicidad dirigir que jugar “nos dice el entrenador campeón.
-¿Cómo comenzaste con esta pasión?
–Por un amigo que me llevó de ayudante de Darío Felman en Gimnasia de Mendoza en el 2000, yo tenía que analizar a los rivales y a fines del 2001 me voy a Gutiérrez, Atilio Civitillo se hizo cargo de la Primera y me llevó como ayudante, estuvimos tres años y después me voy a trabajar a Del Bono de San Juan ya como entrenador, paso por Municipal de Godoy Cruz, perdimos dos finales para ascender. Después de esto me contrató Murialdo para hacer algo distinto, querían potenciar las inferiores y armar un equipo de jugadores de 13 a 17 años con un gran plantel de trabajo y trabajaban con la Primera de lunes a jueves.
-¿Cómo fue esa experiencia?
-La verdad que fue para mí importante, salieron jugadores como Emanuel García que jugó en Godoy Cruz, hoy está jugando en Gimnasia, Perrone en San Martín de San Juan, Elio Díaz en Gutiérrez, Pedro Cazorla que está jugando en el fútbol chileno y todos salieron de ese selectivo. Además fui parte con la primera del único título de Murialdo en Primera en el 2008 y el equipo de Tercera de ese momento armado como te conté con pibes también logró el campeonato venciendo los dos a Huracán Las Heras.
-¿Y cuándo volvés a San Rafael?
Justamente, a mediados del 2009, dejo Murialdo, mi viejo estaba enfermo y mi vieja sola, tengo dos hermanas pero viven lejos, tomé la decisión y me vine pensando que era por seis meses, hasta fin de año. Cuando llegué me llamaron de Huracán y me ofrecieron coordinar las inferiores y que colaborara con Hugo González, que era el técnico de Primera. Logramos salir campeones en 5º y 6º, además de clasificar al Federal con la Primera.
-¿Después llega Pacífico?
Sí, ahí voy a trabajar como ayudante de Miguel Buxó, hicimos un gran torneo clasificamos a semifinales y a mediados de 2013 me buscaron del Atlético Pilares y me ofrece dirigir el Clausura de la Liga en Primera.
-¿A Pilares llegaste para hacer un trabajo integral o solo Primera?
-Primero fue solo con la Primera y después algo más grande, pero se trabaja mal en los clubes se invierte mucho en Primera y muy poco en inferiores, al revés de cómo debe ser desde mi punto de vista, vos tenés que trabajar e invertir en las bases.
-¿Te preguntaba porque sé que vas a ver las inferiores, en Pedal lo hiciste?
Sí, voy a ver las inferiores y trato de colaborar pero es difícil, el trabajo en las divisiones menores es muy básico, no dirige gente capacitada, algunos que jugaron, pero no por haber jugado podés ser técnico, los profes han abarcado todos los trabajos y es una responsabilidad de los entrenadores. En Mendoza si no sos técnico recibido no podés trabajar como entrenador, los cursos de entrenador allá en primer año siempre hay 40 o 45 alumnos, en cambio en San Rafael te dan un carnet provisorio de la Liga, lo tiene cualquiera y así el trabajo es muy malo, he visto cosas que no deben ocurrir, en inferiores no hay ningún médico por ejemplo.
-¿Volviendo a Pilares se lograron cosas importantes?
-Sí, nos trataron muy bien, hicimos un trabajo importante, salimos campeones y llegamos a la final del Federal C, perdiendo por penales, organizamos algunas cosas que son parte de un club. Al año siguiente con cambios en el equipo logramos clasificar al Federal C, pero yo no arreglé con el Pastor y me fui.
-¿Después viene Pedal, fue una buena campaña porqué te fuiste?
-Llegué a mediados del 2015, y de inmediato nos tocó el clásico con lo mejor de Huracán y logramos empatar, fue un buen envió anímico porque los chicos venían de varias derrotas seguidas, después estuvimos 11 partidos sin perder y nos clasificamos al Federal C. Con respecto a la pregunta en sí, el ganar no es solo salir campeón, yo cumplí todos los objetivos que me propuse, salir del descenso, clasificar entre los cuatro, darle un aire al plantel y la posibilidad a chicos que no iban a jugar, que pudieran hacerlo en otro lado, nos armamos para el otro torneo, subimos a nueve chicos de quinta a Primera y quedamos un punto atrás de Rincón que fue el que clasificó. Después yo solo tenía contacto con el presidente Espuri, con Weber y Freire que estuvieron siempre, al resto no los conocía, si sabía que no nos querían prestar la cancha para entrenar, estaban en esos detalles y bueno después habrán votado y la mayoría decidió que no tenía que seguir. Igualmente yo ya había tomado una decisión, más allá de lo que ellos definieran.
-¿A partir de tu ida de Pedal, llegó un momento filosófico en la vida futbolística de Yáñez?
-Me dediqué a estar con mi familia y ver fútbol, en el Sur en La Pampa, San Juan, Catamarca, me llama la atención que solamente nuestro fútbol, en su gran mayoría de Córdoba, Rosario y Buenos Aires, entonces intenté buscar una explicación a esta situación.
-¿Cuando aparece la oportunidad de Rincón?
-En diciembre de 2017 me llamaron dirigentes de Rincón, nos juntamos y organizamos de acuerdo a lo que yo pretendía y decidieron contratarme, así arrancamos el 13 de diciembre.
-¿Esperabas este éxito?
-Cuando asumimos nos propusimos llegar al último partido del Federal C y lo conseguimos, jugamos los 12 partidos, esto nos dio la posibilidad de estar clasificados al próximo Regional Federal Amateur, algo histórico para el club. A partir de esto nos propusimos metas cortas, primero fue clasificar a la fase campeonato, sin saber apareció la Copa San Rafael en la cual estamos en el triangular final.
-¿El objetivo era el campeonato o con pelearlo estaba bien?
-Primero no me gusta este formato, hay rivales con los que no jugamos nunca, sería bueno jugar todos contra todos. Cambiamos un poco la forma de entrenar, el equipo empezó a ganar, y se convenció, perdimos el último partido con Calle Larga 2 a 0 y después no perdimos más, son 12 o 13 partidos sin caer y los triunfos te motivan porque te acostumbrás a ganar. El equipo sabía que jugando muy mal, no íbamos a perder, tuvo mentalidad ganadora.
-¿Tuviste una base, una columna vertebral como se dice, o el funcionamiento colectivo fue esa base?
-Creo que lo colectivo fue la clave, se lesionó Juan Ferreyra y se fue Saponara, pero como habíamos sumado a Palleres y Alan Núñez, pudimos reemplazarlos, también llegó Adasme un gran arquero que hacía mucho no jugaba y necesitaba por un lado que los dos tuvieran competencia y que Barroso tuviera descanso ya que hacía tres años que viajaba 200 km todos los días para entrenar, con el desgaste físico y mental que eso supone.
-¿Hay jugadores en Rincón que estén para una categoría superior?
-Creo que sí, tenés el caso de Adasme que viene de jugar en Independiente Rivadavia y bueno después pasa por el convencimiento de ellos y por el cuidado personal, esto último es fundamental y si n estás educado, después de grande cuesta. El profe puede hacer maravillas pero si no te cuidás no hay posibilidades. Y esto se complica en las categorías bajas, hay jugadores con muchísimas condiciones, pero si no podés vivir de esto o cobrar regularmente es muy difícil.
-¿Seguís en Rincón para el Regional Federal Amateur?
-Todavía no nos hemos juntado con los dirigentes, tienen muchas complicaciones con otras tareas del club, pero ya nos vamos a juntar, veremos si coincidimos, yo necesito que si vamos a poder traer uno, dos o los refuerzos que sean, me den tiempo a trabajar y después lo básico, que no me digas vamos a viajar en el día, porque entiendo la situación económica, pero así no se puede, por eso si nos ponemos de acuerdo y el presupuesto que tienen los dirigentes acompaña vamos a seguir y si no, está todo bien, me voy feliz ya que fue un año espectacular.
-¿Rincón jugó el fútbol que te gusta?
-Sí, intentamos atacar siempre, hay partidos que se complicaron porque nos jugaron muy atrás y lo definimos con pelota parada, a mí me gusta atacar y mis jugadores ya saben lo que tienen que hacer, tenemos variantes ofensivas que ya las tienen incorporadas porque las hemos trabajado todo el año, después defender es muy fácil, defender es correr, pasar la línea de la pelota, esperar de frente, achicar líneas y nada más, eso no tiene ninguna virtud.
-¿Bueno los agradecimientos por este título, para quienes van?
–Mirá, los agradecimientos son siempre los mismos, a Dios por darme la posibilidad de ayudar a que Rincón quede en la historia, a los hinchas, dirigentes, jugadores y después hago una salvedad, cuando perdí la final con FADEP tenía 10 llamadas, tres de mi mamá, dos de mis hermanas y después de amigos como Juri, Weber, Fúnez, Longo, Freire y nada más, ahora, después de salir campeón, cuando miré el teléfono, tenía 850 mensajes, pero yo lo tengo claro, el fútbol es eso, por eso hay que tomarlo con tranquilidad, yo sé que si perdemos el domingo nos van a putear y si ganamos seguiremos siendo los mejores, hasta que perdamos.
Un apasionado del fútbol, al que le gusta que sus equipos ataquen siempre, menotista sin vueltas, aunque si sus jugadores la tienen que tirar a la tribuna no se pone colorado. Conceptos claros en temas complicados, como el trabajo y la organización en inferiores, como así también en la ingratitud de quienes rodean el ambiente de la redonda, podríamos resumirlo en un pensamiento: «Los que están cuando perdés, son los que recuerdo cuando gano».
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