River jugó muy mal y no pudo ni acariciar un empate, ya que Gimnasia se lo ganó a un minuto del final. Flojísima presentación del Millonario, que el sábado jugará la final de la Copa Argentina. Ay…
No hay caso. River sigue sin levantar, fue nuevamente un desastre en defensa y ni la suerte lo acompañó, ya que Gimnasia terminó encontrando la victoria a un minuto del final del partido. Fue 2-1 para el Lobo y una nueva caída del Millonario, que el sábado debe jugar la final de la Copa Argentina con la moral más que en baja.
Tres puntos sobre los últimos 18 para el equipo de Gallardo y, sobre todo, una actuación nuevamente decepcionante. Scocco fue el único de se salvó en ataque, buscando constantemente y convirtiendo el único gol con una definición brillante de tiro libre. Y abajo Bologna, que sacó tres pelotas clave y evitó la goleada. La defensa, especialmente en el retroceso, tuvo un flojísimo encuentro.
El Lobo se aprovechó de los errores y encontró su merecida victoria en el final. Le costó, porque también tiene sus limitaciones, pero finalmente volvió a quebrar a un River que dio todas las ventajas posibles.
En seis días River tendrá el partido más importante: en Mendoza contra Atlético Tucumán buscando un nuevo título. Gallardo deberá laburar la cabeza de los jugadores y levantarles el ánimo, más allá del rendimiento futbolístico en sí.
Fuente: Olé
