Godoy Cruz sigue acechando a Boca en la Superliga: le ganó 2-0 el clásico cuyano a San Martín SJ y quedó a tres puntos del equipo de Guillermo, que no podrá dar la vuelta en La Plata y encima tiene complicada la clasificación en la Libertadores.
El Tomba no tiene pensado rendirse, está más que explicito. ¡Y como para hacerlo! Este viernes, ante su gente, el elenco mendocino ratificó en el clásico cuyano frente a San Martín de San Juan todo lo bueno que viene realizando en la Superliga. Y claro: tampoco piensa dejar en paz a Boca, el líder del torneo local. ¿Por qué? Porque Godoy Cruz se impuso 2-1 ante el Santo Verdinegro y continúa pisándole los talones al equipo de Guillermo (quedó a tres puntos cuando restan dos fechas), que ya cuenta con la certeza de que no podrá coronarse este fin de semana en La Plata y que también sabe que su situación en la fase de grupos de la Libertadores no es la que hubiese querido o deseado porque, tras caer este miércoles ante Palmeiras, su clasificación a octavos de final se tornó complicada por el triunfo de Junior ante Alianza Lima.
A los dirigidos por Dabove les alcanzó con dos cachetazos certeros para dejar nocaut a los sanjuaninos: primero, golpearon con un buen testazo de Ramis a la salida de un tiro de esquina. Y luego, a los dos minutos del complemento, el Morro García selló el triunfo con otro cabezazo imponente (alcanzó los 14 gritos y sigue siendo el goleador de la Superliga).
De esta manera, derrotando sin mayores atenuantes a un rival que no tuvo reacción (y que terminó jugando con nueve por las expulsiones de Escudero y Mosca), el Tomba continúa metiéndole presión a Boca en la lucha por el título y no lo deja en paz, ni siquiera en la semana compleja que atravesó (y atraviesa) tras el tropiezo copero.
Cabe señalar que los de Barros Schelotto visitarán este domingo por la mañana a Gimnasia LP (el partido es a las 11) con la seguridad de que no podrán dar la vuelta por el triunfo de Godoy Cruz. Pero, de todos modos, el Xeneize sigue dependiendo de sí mismo: debe sacar al menos cuatro puntos en lo que queda de la Superliga para coronarse (se iría a siete de distancia y sería inalcanzable para los mendocinos).
Fuente: Olé
